Para abonar con moneda extranjera, realizar la compra mediante esta web, abonar USD 12 mediante WESTERN UNION. Puede solicitarnos nuestros datos por email a ventasninapezediciones@gmail.com
POR FAVOR REALICE LA ORDEN DE COMPRA MEDIANTE ESTA PÁGINA Y LUEGO EL PAGO MEDIANTE WESTERN UNION.
SÓLO ENVIAMOS EL LIBRO EN VERSIÓN DIGITAL, NO IMPRESA.
UNA VEZ REALIZADO EL PAGO, ENVÍENOS EL COMPROBANTE VIA EMAIL A VENTASNINAPEZEDICIONES@GMAIL.COM
La función IMPRIMIR de este libro, no está disponible.
El envío de link de lectura puede demorar hasta 72 horas hábiles.
Zara, una nena de ocho años, quería una mascota. Así le llegó de regalo una lora, a quién bautizó Frida. Pronto se hicieron muy amigas. Un día, tras visitar al veterinario, se enteraron de un pequeño detalle. Frida, no era una lora, ¡era un loro! Desde ese momento comenzó una conexión muy especial entre Zara y su mascota. La cual tuvo como principal protagonista al más puro y sincero amor.
"—Mamá, estoy cansada, le enseñé, le repetí muchas veces y no entiende. Se quiere llamar Frida, así que ya está. Le quedó Frida.
Su mamá, sin entender nada, le dijo:
—Zara, ¿cómo se va a llamar así? Es un loro, todos se van a reír ¿qué va a decir la gente? Que es un loro… rarito. No, de ninguna manera. Tarde o temprano tiene que
entender. Seguí insistiendo."
$500,00
Plazo de entrega aproximado: 24 hs hábiles
Para abonar con moneda extranjera, realizar la compra mediante esta web, abonar USD 12 mediante WESTERN UNION. Puede solicitarnos nuestros datos por email a ventasninapezediciones@gmail.com
POR FAVOR REALICE LA ORDEN DE COMPRA MEDIANTE ESTA PÁGINA Y LUEGO EL PAGO MEDIANTE WESTERN UNION.
SÓLO ENVIAMOS EL LIBRO EN VERSIÓN DIGITAL, NO IMPRESA.
UNA VEZ REALIZADO EL PAGO, ENVÍENOS EL COMPROBANTE VIA EMAIL A VENTASNINAPEZEDICIONES@GMAIL.COM
La función IMPRIMIR de este libro, no está disponible.
El envío de link de lectura puede demorar hasta 72 horas hábiles.
Zara, una nena de ocho años, quería una mascota. Así le llegó de regalo una lora, a quién bautizó Frida. Pronto se hicieron muy amigas. Un día, tras visitar al veterinario, se enteraron de un pequeño detalle. Frida, no era una lora, ¡era un loro! Desde ese momento comenzó una conexión muy especial entre Zara y su mascota. La cual tuvo como principal protagonista al más puro y sincero amor.
"—Mamá, estoy cansada, le enseñé, le repetí muchas veces y no entiende. Se quiere llamar Frida, así que ya está. Le quedó Frida.
Su mamá, sin entender nada, le dijo:
—Zara, ¿cómo se va a llamar así? Es un loro, todos se van a reír ¿qué va a decir la gente? Que es un loro… rarito. No, de ninguna manera. Tarde o temprano tiene que
entender. Seguí insistiendo."